La segunda edición de la Montjuïc – Tibidabo congregó a 499 corredores, una carrera sostenible y única que organiza SevenMila

– Cristina García es la vencedora de la categoría femenina y Marc Guàrdia y Llorenç Esteve de la masculina con un amistoso empate

La segunda edición de la Montjuïc-Tibidabo, organizada por SevenMila, ha estado todo un triunfo, consolidándose como un acontecimiento deportivo destacado en la ciudad. En la festiva mañana de Todos  los Santos, 499 corredores y corredoras se sumaron al emocionante desafío de recorrer 20 km entre las icónicas montañas de Montjuïc y el Tibidabo, con más de 400 metros de desnivel positivo y destacando un enfoque sostenible y su recorrido híbrido (50% asfalto y 50% trail).

499 runners disfrutaron ayer de una matinal de todos los santos increíble: atravesar Barcelona por sus dos montañas; Montjuïc y el Tibidabo.

SevenMila cogió la dirección ejecutiva de la carrera en 2022, donde más de 400 corredores se unieron al reto, en esta segunda edición organizada por la agencia 499 corredores y corredoras han disfrutado de la exigencia de esta carrera: 20Km y más de 400 m de desnivel positivo.

Cristina García se levantó con la victoria en la categoría femenina, con un tiempo de 1.24:48. En la competencia masculina, Marc Guàrdia y Llorenç Esteve compartieron el primer lugar, registrando un tiempo de 1.09:03. Laura López se destacó como la segunda en el podio seguida por Irene Perales en tercer lugar, y en la categoría masculina, el tercer lugar fue para Joan Riutort.

La Montjuïc-Tibidabo, también conocida como Memorial Francesc Mates, cogió el testigo de la carrera de la amistad, transformando la prueba en todo un reto por los amantes del running con unas vistas privilegiadas de la ciudad de Barcelona

Un equilibrado trazado, 50% asfalto y 50% trail

La carrera empezó con un emocionante descenso desde la montaña de Montjuïc por calles amplias y después se adentró en la ciudad con un recorrido directo, atravesando varios barrios de Barcelona, incluyendo Pueblo-Seco, Sant Antoni, la Antigua Esquerra del Eixample, Las Cortes y Sarriá. Después, dejó atrás la ciudad y ascendió por una carretera panorámica con vistas espectaculares, pasando por Vallvidrera antes de conseguir el Tibidabo. Finalmente, la ruta descendió a Vallvidrera y tomó un desvío por caminos que llevaron al Área de ocio de Santa María de Vallvidrera, donde se encontraba la línea de meta.

La sostenibilidad como prioridad

La Montjuïc – Tibidabo es una carrera sostenible que invierte parte de sus inscripciones a preservar el Parque de Collserola, y por eso, el reto ofrece un límite de plazas para correr la carrera, siente 499 su máximo de dorsales disponibles. Además, la Montjuïc – Tibidabo cuenta con el apoyo de vehículos eléctricos proporcionados por BYD Quadis grupo y SEAT MÓ, lo cual garantizó la reducción de emisiones de CO₂ en las zonas naturales de Collserola.